jueves, 23 de diciembre de 2010

Tú eres mi debilidad. Tú eres mi fortaleza. Nada de lo que tengo en el mundo tiene tanto sentido, porque yo soy el pez y tú eres el mar. Cuando estamos juntos o cuando estamos separados no hay nunca un latido en el medio del latir de nuestros corazones, porque yo soy la manzana y tú eres el árbol. Vivir el día a día es todo lo que hacemos. Vivir el día a día es bueno para ti. Tú eres mi hombre, yo soy tu mujer. Nada más importa en realidad y ahora comprendo que yo soy una puerta y tú eres mi llave. Y cada mañana despierto en tu sonrisa, siento tu respirar en mi cara y el amor en tus ojos, porque tú eres la miel y yo soy una abeja. Vivir el día a día es todo lo que hacemos. Vivir el día a día es bueno para ti, nosotros dos, para ti también.

No hay comentarios:

Publicar un comentario